Sobre Dios y Luis Salom
Como ya sabréis casi todos el pasado viernes falleció de nuevo un piloto del mundial de Motociclismo. Esta vez de Moto 2, la categoría intermedia pero igual de peligrosa que su hermana mayor. Un trágico accidente se ha llevado por delante la vida de Luis Salom. 24 años. Aún una promesa por terminar de explotar y un joven con muchísima vida por vivir más allá de las motos.
La muerte de Luis Salom es otra más en el largo reguero de muertes y damnificados que deja el motociclismo. Por suerte cada día son menos. Las medidas de seguridad son cada vez mayores y lejos quedan esos locos con un casco de medio huevo, gafas de plástico y chupa de cuero en circuitos infernales sin apenas medidas de seguridad. Sin embargo no podemos olvidar que estos «locos» no llevan más protección que sus cuerpos y hay mil circunstancias incontrolables que pueden acabar con sus vidas, como se empeña en recordarnos de vez en cuando accidentes como este.
Así son las carreras de motos: una locura donde se juegan literalmente la vida en cada curva, cada frenada, cada vez que se meten donde parece que no caben para un adelantamiento o cada vez que, como ayer, se intenta arañar una décima frenando un instante más tarde antes de una curva. Así son las carreras de motos y por eso me apasionan. Desde aquí, y antes de seguir, mi más sentido pésame a su familia «convencional» y a toda la familia del campeonato de motociclismo. Y por supuesto mi reconocimiento a él y a todos esos locos de las motos que me hacen vibrar cada fin de semana de carreras. D.E.P.
Y dicho esto, me centro en un tema quizás un poco polémico, en la foto que ilustra este post y que he extraído de El Español. Dejo los derechos al pie de la foto y aplaudo al fotógrafo. Me parece espectacular. Luis Salom, el mexicano de Mallorca, rezaba cada fin de semana antes de comenzar la carrera. En la parrilla de salida, cuando todos exhiben sus gafas publicitarias, la toalla con la marca que paga y las botellas de bebidas energéticas que les dan fuerzas, y dinerito al bolsillo, él sacaba unos instantes para plantarse rodilla al suelo junto a su moto y rezar.
Yo he visto esa foto y a mi los pelos se me han puesto de punta. Una persona joven, tenía 24 o quizás 23 cuando le hicieron esa foto, encomendando su vida a Dios antes de ponerse a llevar al límite la tecnología. El decía que no pedía suerte para la carrera sólo no tener mala suerte, que no pasara nada grave. Dicho desde mi más profundo respeto por todos los creyentes y por todo aquel que haga su vida conforme a su ideología sin molestar a nadie, a mi me resulta incomprensible. Alguien que vive rodeado de un mundo tan tecnológico como el de las motos, donde tanto la electrónica como la física, química, aerodinámica y cualquier rama de la ciencia se tiene en cuenta, al final acaba rezando a Dios por su vida. A Dios. Me alucina.
Precisamente esta semana me han preguntado si creo en Dios. Solía decir cuando me hacían esa pregunta que quizás Dios, Alá o algún ente superior llamado X puede que exista. Que no se ha demostrado que no esté, bla bla bla. Esta semana he respondido un no rotundo y convencido. Para mi no existe Dios. Lo digo sin enfado ni rencor. No es porque me haya tratado mal la vida, porque mis padres hayan muerto relativamente jóvenes (justo esta semana se han cumplido 14 años de la muerte de mi padre) o porque Dios se lleve a jóvenes como Luis Salom con 24 años y tanto por ofrecer. O porque deje que mueran miles de personas cruzando un mar hacinados en barcas huyendo del horror de su tierra, o porque existan las guerras… No hay rencor. Simplemente para mi no existe.
Rezar antes de una carrera a ese Dios. Quizás a muchas personas les gusta tener esa pluma de Dumbo. Eso a lo que agarrarse y que les de fuerzas. Ese Dios estaría ayer muy ocupado para dejar que la mala suerte hiciera que este pobre chaval, que creía fervientemente en él y le hablaba a menudo, se estampara contra su moto tras una caída en la pista y acabara falleciendo. Tendría mil cosas que hacer claro. Millones.
Para mi sencillamente no existe. Lo que sucede, bueno o malo está en nuestras manos o es fruto de la fortuna buena o mala. Ayer Luis Salom tuvo toda la mala suerte que podía tener en su vida y un accidente que podría haber sido un sencillo resbalón por la pista, como tantos cada fin de semana, se lo llevó.
No, no creo en Dios. Ni en el bueno ni en el malo. Creo en mi. En la buena gente que me rodea, en la gente que intenta hacer el bien cada día a su nivel. En la gente justa, en la que se involucra. Creo incluso en los que creen en Dios y usan esa creencia para mejorar, como entiendo que hacía Luis o hacen tantos y tantos buenos creyentes. Creo en la buena gente. ¿En Dios? Pse.
No soy muy de poner citas, pero esta que me han dicho esta semana creo que viene al pelo.
Yo no sé si Dios existe, pero si existe, sé que no le va a molestar mi duda.
Mario Benedetti
Bravo!! Inmenso post, nada más que añadir!!
Gracias, caballero!
la madre q te parió!
Más wenesilla que era 🙂
Un recuerdo desde aquí a tu padre…y un beso grande para ti.
Gracias Amiga!!
Pues mira, en el mundo de los pilotos lo de creer en dios esta muy extendido, no se si esa sensacion de tener mas peligro que la gente normal les hace ser mas proclives, por mi parte, mi dios y el tuyo son parecidos, un abrazo Dani.
Supongo que será casi necesario cuando estás siempre al límite creer en que hay algo después. Digo yo
La fe va y viene. Pero cosas como las que ocurren, hacen que se aleje más y más… Creer en Dios, asi, asi. En las religiones? Ninguna.
Yo hoy en día ni una cosa no otra. Pero respeto total sobre todo a quien respeta.
Pequeño estás bien? necesitas algo?
Aro que estoy bien. Creo en mi 😉
Muy buen post. No tengo nada que añadir 🙂
Gracias, PeliRizosa!!!. Besos!!
Mira dagarin me ha resaltado mucho lo que hayas escrito en este articulo y más sabiendo que haya muchísimos que piensan como tú. Me tomo molestia de escribir este mensaje como una opinión como cada cual y cómo un consejo si lo quieren tomar en cuenta, cada uno es libre de hacer lo crea conveniente; y te diré unas cuantas cosas a ti y a los que niegan la existencia de Dios. Leyendo un artículo de Luis Salom, se me ocurrió entrar en Google a buscar qué tipo de creencia tenía Luis ya que había leído que rezaba antes de las carreras, y derepente me encuentro tu artículo y aunque no lo haya leído todo, he leído lo más importante que es el echo de negar la existencia de Dios. No te voy a decir que si una creencia o religión es mejor que la otra, pero si te voy a decir que NEGAR A DIOS Y SU EXISTENCIA IGUAL A MUERTE FÍSICA Y ETERNA. Por la simple razón de que nosotros tenemos la vida de El y se la debemos . No nos corresponde preguntar o juzgar que por qué uno se va a los 24 , 30, 50, 80,al nacer o cuando sea y por el motivo que sea. Es es solo la cuestión de Dios, El nos da la vida y El es el único que tiene derecho a ella. (Ay un ejemplo en la Biblia en el que un hombre que durante su vida hizo que que le decía La palabra del Señor y cuando le dijeron que se iba a morir rezo y rogó a Dios que le diera más años de vida. su rezo se vio recompensado con 15 años más de vida, pero él cambió completamente transformándose en un hombre al reve muy mal en todos los sentidos. Qué pasó que con este cambio? perdió la eternidad con Dios su creador, por qué? Por qué si Dios decidió que su hora había llegado de irse de la tierra e irse con El eso tenía que pasar pero no como pasa hoy en día la gente se piensa y cree que lo saben todo, pues Dios sabe todo y por eso no lleva a unos a una edad y a otro a otra precisamente para no perder la vida eterna que es lo más importante por qué es lo que queda después de esta vida en carne y huesos.) Ahora de nosotros depende donde nos vamos a ir después ( después de la muerte sé queda el alma que es la vida que nos da Dios y que por obligación se tiene que volver a El) depende de lo que hacemos en nuestra vida de lo que elegimos, todos somos libres de elegir una vez hayamos cumplido al menos 18 años cuando uno se hace mayor de edad y puede decidir qué camino seguir en la vida. Por Eso vino Jesus Cristo el Hijo que es Dios también ( ya sabéis que son Dios Padre, Dios Hijo y Espíritu Santo, los 3 son una, DIOS) y dio su vida para que todo aquel que creyera en El y en su legado más tenga la vida eterna y no muriera jamás. Esto es lo que cada uno tiene que hacer en su vida, creer en él, llamarlo y aceptarlo en su vida y que después viva la vida según la Biblia, La palabra del Señor. Todo aquel que no haga esto y más aun que nieve la existencia de Dios es considerado por el mismísimo Dios , blasfemia con El y es muerte física y después eterna en el infierno. Piensa en todo esto tú y los demás, busca la Biblia léetela, Y sobre todo a profundiza el versículo de oro de la palabra del Señor: Juan 3:16.
PD. En Google ay un enlace con muchísima haga te y sobre todo famosos que han negado la existencia de Dios y han muerto rápidamente, buscadlo. Eso significa que no se sabe cuánto tiempo dará Dios a cada uno de vivir más después de su negación y pero mientras sigan viviendo no dejen que pase un minuto, un día o más por qué nunca se sabe cuando se va uno…
Todo esto te lo escribo a ti y todos los demás por qué tengo por obligación como creyente y por qué quiero que nadie se vaya al infierno si no al cielo eterno con el Señor y ténganlo en cuenta por qué todo esto queda grabado y en un día en el juicio final servirá de prueba y testigo contra todo aquel que haya negado en su vida la existencia de DIOS.
QUE DIOS SE APIADE DE TODO AQUEL QUE LO NIEGUE Y LE DE DÍAS PARA CONOCERLO, CREER EN EL Y ACEPTARLO PARA QUE CONSIGA DE ESTA FORMA SALVAR SU VIDA PARA SIEMPRE Y GANAR LA VIDA ETERNA, AMÉN
Perdonad la falta de ortografía, no soy español, ni latinoamericano y no suelo revisar, ni corregir, lo hago alguna vez solamente y tampoco me sé escribir a la perfección, gracias.
Aquí, queda tu opinión, tan respetable como la mía y la de cualquier otro.
Un saludo!
Hola primo. Me tocaste la fibra. Jeje.
Mira, yo soy amante sobre todo del respeto. Y la buena educación, eso es primordial, así que me gusta cuando dices que hay que respetar.
Respecto a Dios, te diré que yo estoy en el polo opuesto a tu post. Yo he sufrido también. Hay veces que no entiendo bien las cosas, y creo en Dios. De hecho la experiencia mía de Dios comenzó con la muerte de una prima por parte de madre que falleció en accidente de tráfico muy joven, cuando estaba haciendo planes para casarse. Aquello me tocó tanto, que empecé a cuestionarme, pero precisamente al contrario que tu. Pensé que la vida, esta maravillosa vida que tenemos, esta creación tan maravillosa que es el planeta, el universo, es imposible que sea producto del azar. O dicho de otro modo, es imposible que no exista Dios. Yo en aquel entonces pensé: si la vida y la muerte es así, entonces debe existir otra realidad que no vemos que es superior a esto que tenemos, pues para mi, la vida es incomprensible de este modo. Sólo desde la óptica de la fe en Dios se puede entender tanto dolor como vemos a nuestro alrededor, y además sufrimos.
Soy perfectamente consciente que hay muchos que no creen en Dios. Algunos de los no creyentes respetan, otros simplemente se burlan. Eso es malo.
Frases hay para todos los gustos. Yo tengo otra. Si Dios no existe, yo iré al mismo lugar que todos cuando muera. Si Dios existe, no todos irán al mismo lugar. En ningún caso digo esto como amenaza de condenación para nadie, porque yo no soy nadie para juzgar ni condenar. Mi Dios es un Dios que ama al ser humano, y que tiene una misericordia infinita. Las desgracias humanas, son consecuencia de los malos actos humanos. Muchas enfermedades por no decir todas, son consecuencia de algo que fue mal en nuestra conducta o en la de otros. Somos una cadena. Los errores de unos afectan a otros. Si yo como demasiado me daño el estómago, y posiblemente otros órganos de mi cuerpo. Si muero de eso, parte de la responsabilidad o toda, será mia. Si voy en moto y me estrello, es porque he tenido una mala decisión en la frenada, en la velocidad, etc, o bien la moto tuvo un fallo técnico porque alguien se equivocó. No es azar, no es suerte. No existe la suerte.
Se le pide a Dios para que te guarde, pero no en plan mágico y tal, sino para que nos de la claridad de mente suficiente para cumplir con las leyes de la naturaleza lo mejor posible. Si los hombres cumplieran los mandamientos de Dios no habría tantos problemas en el mundo. De hecho habría paz. Si los hombres siguieran a Jesucristo, el mundo cambiaría. Puedo probarlo.
Todos vamos a morir, y puede ser en cualquier momento. El mal no es obra de Dios. Dios lo permite porque no es un tirano que maneja al hombre como marioneta. Le dio algo que todo el mundo desea siempre. La libertad.
Libertad de creer o no creer también.
Respeto mucho a quien no cree, no lo juzgo, pero aquí queda mi reflexión, por si alguien piensa que honestamente hay verdad en ella.
Un abrazo primo.