El perro de Pavlov: de cabronazos y …
Normalmente me considero una persona pacífica y tranquila. Hay pocas cosas que me enfaden realmente. No es que todo me parezca bien, pero cosas que de verdad me alteren y me hagan perder los nervios hay muy pocas. Casi todas están relacionadas con el trabajo por el montón de horas que tengo que pasar allí y lo poco que llego a comprender muchas de las cosas que suceden a mi alrededor. Aparte de eso, suelo tomarme el resto de cosas con filosofía y raro es verme saltar por algo.
Sin embargo, el otro día un twit me hizo sacar la vena a lo Patiño y no tuve más remedio que contestar, y mira que esas cosas no me gustan, más aún tratándose de la típica guerra de sexos, pero ya os digo que este tema me dispara un resorte interno en mi cerebro que me impide controlarme. Quizás estoy un poco condicionado a lo perro de Pavlov por tantas veces que frases de ese estilo han tenido un efecto negativo en mi vida sentimental. La frase que retwiteó ese amiga, proveniente del twitter de @malarodriguez, fue esta:
Cuándo estarán de moda los hombres inteligentes? (léase no chuloputas o cabronazos)
Y tuve que responder algo como «Cuando las mujeres dejéis de ver a los hombres no chuloputas o cabronazos ‘solo como amigos'». Y es que, por desgracia para mi, es lo que he vivido «cienes y cienes» de veces en mi vida. No sé cuantas veces habré escuchado eso de «estoy harta de cabrones», «Yo lo que quiero es un tío que me comprenda», «es que todos los hombres sois unos animales que vais a lo mismo»,… creo que entendéis a que tipo de frases me refiero. Hay dos particularmente demoledoras que me han dicho y que nunca olvidaré: «Es que tu vales demasiado para mi» y un clásico entre los clásicos «No eres tu, soy yo, que no puedo estar con alguien con tan buen corazón». Paparruchas. Porque seguro que hay otra cosa, porque estoy convencido que el fallo es mío, pero no entiendo esas excusas baratas y cobardes en lugar de decir la verdad. Y no preguntes, porque la otra frase que he escuchado más de una y de dos veces es la de «si tu no lo sabes, no merece la pena que yo te lo diga».
Y tu estás ahí, como amigo. Y tu te muestras como eres. E intentas no presionar, y ser su amigo antes que su pareja,… y al final lo único que ves es como te dan dos besos en las mejillas y se largan con el «chuloputas o cabronazo» de turno y a ti te quieren «sólo como amigo».
Y encima suelen tener luego la desfachatez de intentar que sea yo el que les ponga un hombro para llorar cuando el «chuloputas o cabronazo» les hace alguna putada, sabiendo que por supuesto volverán con el cabrón en cuanto se les pase el enfado de turno. Y me tocan la moral ya esas cosas, porque encima no puedo evitar estar al lado de una persona (hombre o mujer) que necesite un hombro, así que por mucho que me duela, ahí me tienen escuchándolas. Y espero que las mujeres que leéis este blog no os enfadéis, pero es que es lo que a mi me ha tocado vivir, no puedo decir otra cosa. Y no es por mi último desengaño, es que de verdad que he vivido un buen puñado así. Seguro que hay mujeres muy diferentes y que verán las cosas de otra manera, pero yo no he tenido la suerte de cruzármelas en mi camino sentimental, y así me va.
Y hubo un momento que pensé convertirme en uno de esos tipos que se han llevado a esas mujeres por las que he sentido algo, pero es que no me sale. Eso o lo eres o no lo eres. Y por más que lo intento, a mi me duele ser un cabrón y no me sale hacerlo como lo hacen otros. El otro día hablaba con una «amiga» sobre mi «relacionfobia» y le decía que me daba pereza empezar de nuevo, por enésima vez, intentar luchar por una mujer que me atrajese para comenzar una relación. Me dijo que era curioso que viese el inicio de una relación como una lucha, cuando lo más normal es verlo como la parte más bonita, el momento de descubrimiento, de más pasión… Será que ya han sido tantos que en vez de disfrutar ese comienzo del camino veo el precipicio que siempre me he acabado encontrando al final, cuando he visto como esa persona acababa marchándose, normalmente del brazo de uno de esos tipejos de los que tanto renegaba.
Y supongo que me merezco que os enfadéis y me digais lo que posiblemente algunas me digais. Y pienso ciertas cosas que podéis decirme, pero mejor lo dejo aquí y os dejo que os cebéis conmigo un ratito. Puede ser que tenga que desaparecer del mapa una temporada después de este post, cambiar de avatar, nick y esas cosas. Pero es que esto es lo que yo he tenido la mala fortuna de vivir, no puedo contar otra cosa. Y en mi descargo solo puedo alegar que, como ese triste perro, cuando suenan mis particulares campanas a modo de frasecitas, pues salivo 🙁
Pues mira que venía a darte caña, pero es que tienes razón. Pero recuerda, hablabamos de «moda» y las modas absorben un sector de la sociedad mayoritario, sí, pero suele ser el que menos personalidad tiene, el que deja que se lo lleve la corriente.
Las modas proponen, no imponen, querido amigo. Y son sólo eso: modas.
P.D. Todo esto viene a decir: no desaparezcs del mapa, Dagarin;)
jajaja. Ya me comentaste que hablabais de moda, pero es que a mi esas cosas me tocan demasiado una parte de mi corazón especialmente lastimada.
Y si tu me lo pides no despareceré 🙂
Saludos
HOla Daniel, no tenemos porqué enfadarnos porque alguien como tú exprese en este medio sus vivencias más personales. Tienes toda la razón, parece que las mujeres buscamos en una etapa determinada de nuestra vida nuestro contrario, el típico chico guapo, malo, sin modales, que en realidad no aporta nada. Pero es una fuerza mayor y atrayente. Pero cuándo ya pasas de los 20, te encuentras con una autoestima que te permite avanzar, que has logrado conocerte a tí misma, pasa a una plano muy lejado el esteriotipo ese que en un momento fue muy atrayente. Te puedo decir que yo me quedé con el «amigo», y hasta ahora nos ha ido muy bien, el hombre que sabe cuánto estás bien y cuándo no, que respeta tus hobbbies , tus amigos, tu espacio, y al contrarior, que sabe cuándo un NO es un SI , y cuándo un SI es un NO. que sabe estar en cada momento, que te hace reir, que te llama cada día para ver como te va por estar tierras, y te da ánimo. Estoy segura que eres de estos gremios de chicos, que desde mi opinión, estáis en extinción,como el máximo de los respetos digo EXTINCION y que no me cabe la menor duda, que tu otra mitad está en algún lugar, esperando a encontrarte. Es necesario pasar por decepciones, encontrarse con personas de paso, para finalmente encontrar a esa personita que está destinada para tí….
Dicen que las mujeres son las que finalmente eligen al hombre, pero es que hay muchas que están super desorientadas, y no saben ni lo que quieren. Yo te deseo que cuánto aparezca la mujer adecuada sepa que lo que tiene enfrente no lo puede dejar escapar!!
Un abrazo grande Daniel,
Kiss Kiss canarios,
Loly
Muchas gracias por tu punto de vista, amiga Loly y sobre todo me alegra que se entienda que es MI experiencia. y no os enfadéis las féminas lectoras del blog.
Y si encima das un atisbo de esperanza, diciendo que tu acabaste con el amigo, pues mejor que mejor.
Besos!!
Si todas las relaciones te han ido mal y ninguna ha fraguado, deberías plantearte también que parte de responsabilidad te toca a ti también. ¿Que buscas? ¿Que necesitas? ¿Que estás dispuesto a dar? Entiendo que estés un poco hastiado, pero ese hastiamiento no te ayudará, sino que te seguirá cerrando puertas en el futuro. Debes cambiar de actitud frente a la vida. Esa negatividad. Algo no va. Se positivo.
No te creas, anónimo/a que estoy hastiado. Es algo que asumo con normalidad y no es algo ne busque ni necesite. Tampoco estoy negativo en general respecto a la vida, solo en ciertos momentos con ciertas cosas. Intento en general que me domine el positivismo 🙂
Ah, y sobre todo tengo bastante clara una cosa: sé que la culpa es mía. Creo en la democracia y si, como dices, todas han salido mal, es que yo tengo buena parte de la responsabilidad, eso no lo dudo ni un instante.
Un saludo y gracias.
Hola amigo, tienes mucha razón en tus palabras, pero… te has parado a pensar que hay muchos hombres que son iguales que las mujeres que tú describes? Sí los hay.
Y también aquellos que parece que en vez de una pareja quieren una madre o los que se creen superiores a ti por saber más de algo que tú o por tener X cosas más que tú.
Creo que no es cuestión de sexos, creo que es el ser humano en sí.
La búsqueda de una pareja en ocasiones es muy complicada, quizás cada vez más por las exigencias que nos autoimponemos. Pero, hay que tener paciencia, si tiene que llegar llegará y quizás cuando menos te lo esperes.
Animo y un beso,
Cris
Aquí supongo que tendría que haber empezado diciendo que soy hombre y heterosexual. Así es como yo lo he vivido y seguro que la mujeres lo veis desde otro punto de vista y os habréis encontrado con tipos de todas las clases. Como le dije al anónimo/a anterior, seguro que yo también tengo mucha, si no toda, parta de culpa, pero es lo que me ha tocado.
Lo que si que repito es que esto no es fruto de estar frustrado o deprimido. Asumo mi solteria con permanente como algo natural y, ademas, bastante deseado. Solo es compartir estos pensamientos, que me volvieron fruto de esos twits de este fin de semana.
Besos, amiga Cris.
Pues amigo Dagarín, yo te tengo que dar la razón.
No creo que se enfaden las mujeres, porque ellas son las primeras que suelen reconocer éste tema.
Si le preguntas a cualquier mujer, que tipo de hombre quiere, verás que describe a alguien muy diferente del que eligen normalmente.
Pero como se ha dicho por ahí, al pasar los años eso cambia y entonces sí es al realmente «hombre ideal» al que buscan… y lo que pasa es que quedan menos y los que quedan la mayoría ya están «pillados» por algunas mujeres que han demostrado ser más coherentes.
Los que quedan libres, los que quedáis libres, debéis ser conscientes de ese VALOR intrínseco y en vez de amargura convertirlo en amor propio que en realidad es lo que suelen buscar las mujeres, incluso en los chuloputas, buscan confianza.
La combinación de educación, inteligencia, buen humor, saber escuchar y tener personalidad y confianza, es demoledora y triunfadora de plano. Mucho más que el imbécil chulo que sólo tiene la parte de la autoconfianza, pero esta parte es que la valoran mucho. Es como la longitud de onda que emites, si no llega al nivel no la capta su antena.
Piensa en ello y verás que lo único que hay que cambiar es el confiar en tú potencial y eso, poco a poco, se nota y percibe desde fuera… y entonces la cosa cambiará.
Por poner humor al asunto y aunque es posible que hayáis visto o leído el monólogo, os dejo un enlace con uno de este tema de Pablo Motos (otro tonto, pero el monólogo es bueno)
Ella te quiere como amigo
Muchas gracias, me ha encantado la forma de exponerlo, lo recomiendo mucho. Besos!!
Gracias!
Ni me acordaba de este post! Las cosas que escribe uno. Me alegra que te haya gustado 🙂
Pues a mi es que me encantan las personas como tú oye! y si entramos en el lado sexual, eso es lo que más me pone, hombres valientes que tratan con todo el respeto a las mujeres y a mi en particular, porque me gusta cuando me hacen sentir princesa y no una mierda.
Esos hombres de manos limpias tienen el alma igual de limpia. Así que si aún sigues buscando a quién le está bien el zapato de cristal, ya sabes dónde encontrarme.
Te quiero amor.
Gracias Gabi. Un besazo enorme y mira por por la ventana de vez en cuando que en cualquier momento me tienes por allí.
Idem.