Manzanas podridas
Siempre se ha dicho que una sola manzana podrida puede pudrir todo un cesto. Y es totalmente cierto.
Por desgracia, aplicado a las personas, una sola persona de un grupo dedicada a malmeter, crear mal ambiente, protestar de los demás… es capaz de crear al final un ambiente irrespirable y hacer que esta los mejores se hagan malos. He vivido esa desgracia estos días. Una sola persona en el trabajo ha sido capaz de estropear, no todo el cesto, pero si un par de manzanas de muy buena calidad.
Esta vez la cosa me pilla mas de lejos, porque no hablo de la gente con la que trabajo habitualmente sino de otro sub-grupo algo mas alejado al mio. Sin embargo, he visto como día tras días dos buenas personas, buenos trabajadores y compañeros, se iban transformando en personas egoístas, desganadas, con las que no apetecía hablar lo mas mínimo porque todo giraba en base a lo mal que se hace todo en mi empresa y lo mal que lo estaban pasando. Se han ido quemando y quemando hasta que, finalmente, acaban fuera del cesto: se marchan de la empresa.
Y me da muchísima pena, porque la manzana podrida que ha provocado estas marchas sigue ahí preparada para seguir pudriendo el resto de manzanas que entren para reemplazar a las que se han marchado, porque seguramente entrará nueva gente. Y tengo que reconocer, al margen de la pena que tengo, que estas dos personas han demostrado quizás tener poca personalidad al dejarse influenciar tan fácilmente. Uno de ellos si que llevaba tiempo con nosotros y con los años surgen roces y problemas que van llevando a que esta influencia no haya sido mas que la gota que ha colmado el vaso. Sin embargo la otra se ha dejado llevar demasiado fácilmente, no ha sido capaz de buscar otros puntos de vista, otras influencias con las que contrastar. Y ahí si tengo que responsabilizarlos a ellos y no solo a la manzana podrida.
Pero el caso es que el daño ya esta hecho y solo queda la esperanza de que esta manzana al final la saquen del cesto, se marche o que las nuevas manzanas demuestren algo mas de personalidad y capacidad de juzgar por ellos mismos. Una lástima tener que seguir aguantando día tras día el hedor a podrido de esa manzana.
Se me ocurre pensar que si los mejores se pueden hacer malos por culpa de esa manzana, es mejor que las otras dos manzanas se salgan del cesto antes de que terminen totalmente podridas. Además, por lo que cuentas, es eso lo que han hecho, ¿no? Muchas veces vivimos realidades difíciles. ¿Cómo cambiarlas? Lo único que se me ocurre, es dando buén ejemplo nosotros primero, aunque eso también es complicado hacerlo siempre. Perdon por el rollo.
Nada de perdón por el rollo, no es ningún rollo y tienes toda la razón. Las manzanas podridas han salido del cesto y, en cierto modo, es bueno. Es como un cancer, hay que extirparlo antes de que se extienda, aunque en este caso la raiz del problema sigue ahí.
Lo de dar ejemplo, tienes también razón. En manos de cada uno está intentar extender buen ambiente, pero el crear mal rollo, por desgracia, está en la naturaleza humana, como comenté en el post del otro día.
Un saludo anónimo/a.
Pues tu y yo por lo que veo, nos aplicaremos en extender el buén ambiente, es la postura mas sensata, sobre todo en los tiempos que vivimos. Un saludo.