Benditos malvados

Llevo unos dias viendo este anuncio en la tv.

Me encanta y me parece que tiene muchísima razón. Viene un poco a cuento de FlashForward, la seríe que os comenté el otro día que había empezado a ver. Ya me he puesto al día con ella, los 18 capítulos que hay por ahora emitidos. Esta bien, aunque parece que soy un tipo bastante raro porque la serie solo va a tener una temporada ya que no está teniendo buenas audiencias. Y en cierto modo hasta me alegro, porque creo que ya de por si a esta primera temporada le están teniendo que dar bastantes vueltas y líos para llevarla a los 24 capítulos de rigor que supongo que durará. Hay series que francamente son ideas para una temporada. Me pasó con Prison Break y 24. Son series que son buenas por su original idea. Alargarlas temporada tras temporada no hace mas que desviarlas de su planteamiento inicial y convertirlas en una serie mediocre.

El caso es que viendo hoy la F1 (olé por Alonsito, un crack) y viendo de nuevo el anuncio que encabezaba el post, he pensado donde puede estar a mi parecer parte del «fallo» de FlashForward: falta un buen malo. Un malo carismático, al que todos teman, con historia detrás, con profundidad, con un buen motivo para odiarlo, o incluso comprenderlo. Los únicos «malos» que han aparecido han sido bastante de refilón y no han llegado a profundizar demasiado en sus historias.

En general, le pasa lo mismo a todos los personajes: no han sabido dotarlos de un cierto carisma que lleguen a interesarte. Me viene a la cabeza la frase de Jesica Rabit: «Yo no soy mala, es que me dibujaron así». Por desgracia, estos guionistas no han acabado de dibujar los personajes del todo, han quedado en bocetos. Especialmente en el malo principal. Apenas a aparecido realmente, solo ha sido una especie de ente abstracto y, sobre todo, nos hemos quedado con mas preguntas sobre el que respuestas.

Una lástima, porque el anuncio tiene toda la razón. Cuanto mejor es el malo, mejor es la película. O la serie, en este caso.