Sobre Salvados, la manipulación y nuestra conciencia
Empezaré diciendo, para dejarlo claro desde el principio, que no soy demasiado fan de Salvados. Me parece que en muchísimas ocasiones se basa en la demagogia. En el discurso fácil para quedar bien, crear polémica y ser llamativos. No obstante si es cierto que tocan temas que merece la pena tocar y sobre los que está bien remover conciencias. Y sin embargo tampoco suelo verlo porque al final lo único que consigo es llevarme un cabreo y un mal rato sabiendo que al día siguiente todo seguirá exactamente igual.
El domingo pasado lo estuve viendo. Hablaron sobre la tragedia del Metro en Valencia que costó la vida a 43 personas y que se saldó sin ningún tipo de responsabilidad. Fue un accidente irremediable e inevitable. Y punto, no hay más. Unas pocas declaraciones en el «juicio», indemnizaciones a los familiares rápido y aquí no ha pasado nada. De hecho yo ni me acordaba, cuando es una de las mayores tragedias mundiales en una linea de Metro. Habían conseguido su objetivo: tapar el tema rápido y que no perdurase. Hasta que Jordi se encarga de desvelar que no es así, que hubo irregularidades, se perdieron papeles, que antes del juicio hubo reuniones para poner de acuerdo a los comparecientes… Por cierto, que casualidad que el que habló de esas reuniones y que aporto documentos que supuestamente demostraban como aleccionaron a los que comparecía es un ex-jefe de seguridad del metro en aquella época. Hoy en día despedido y que, como el propio Jordi sugiere, suena a actuación por despecho. Este señor se encarga de lavarse bien las manos. No actúa por despecho, él no mintió, sólo ocultó ciertos datos. Él duerme muy tranquilo. Él no sabe nada, pero destapa la mierda. Sin duda un testimonio que cualquier abogado hubiera puesto muy en cuarentena, como poco.
Y uno, que es humano y tiene conciencia, se enciende con todo esto. Con la mierda de la manipulación a la que nos someten. Sabiendo, una vez más, que todo en esta vida se resuelve en los pasillos de la mejor manera posible para los que tienen el mando y/o el dinero. Y este que os habla se pone a escribir este post aporreando las teclas con ira intentando descargar toda la rabia que esto le provoca a la vez que intenta no llenar esto de insultos y barbaridades. Intentando no romper el teclado. Y pienso que es indignante a la vez que retwitteo un post de Jordi Évole pidiendo a la gente que acuda a la manifestación que los familiares de las víctimas convocan cada 3 de cada mes (la próxima el 3 de Mayo) para ver si se hace masiva y se consigue algo. Pero mientras voy escribiendo y voy contestando algunos twits de un grupo de miembros de la #CDE que estamos encendidos con el asunto, me voy dando cuenta, una vez más, que la ignorancia da la felicidad.
¿Sirve de algo mi cabreo? ¿Servirá de algo si el próximo día 3 se presentan 40.000 personas a la manifestación en vez de las 40 habituales? ¿Sirve de algo que mi conciencia y la de todos los que han visto el programa se remueva? Sigo leyendo tuits del grupo mientras suelto aquí todo esto y me da por pensar. Cuantas buenas intenciones, cuantas buenas reflexiones e ideas. Y de qué poco sirve todo. Ojo, todo mi respeto para ellos que son además gente a la que aprecio mucho. Mi sirena, mi poeta, el hombre del renacimiento, mi querido VivaMunera (VIVAAAA), Milady cítrica… como os digo gente a la que aprecio y que están discutiendo con pasión y aportando ideas y soluciones a la corrupción con vehemencia. Sin embargo los leo y sé que todo esto, por desgracia, no sirve de nada. Un rato de twiteo, como el que tuvimos la noche anterior compartiendo canciones disco de los 80 y 90. Nada más.
Ahí siguen los mismos políticos de siempre, aquí y en Pekín, controlados por empresas de marketing en vez de por gente que tenga ideas y ganas de hacer las cosas bien. Buscando dinero bajo cuerda para sus negocios, empresas, cuentas en Suiza, coches… Esto es la política «grande», la lucha por el poder. Simplemente por el poder, no por hacer las cosas mejor. Es triste, pero es así. Decía uno de los twiteros, al último que respondí, que las urnas juzgan a los politicos. Le respondí que los votos se compran. Por desgracia las urnas son simplemente el examen final de las empresas publicitarias que llevan a los partidos politicos.
¿Creemos en las personas? Yo no. Empezando por mi. Tenemos demasiadas preocupaciones, problemas y líos en nuestro día a día como para complicarnos la existencia pensando en lo que pasó con el accidente del Metro de Valencia. Si nos lo dan sencillito, mejor, oye. Y si llega un periodista como Évole y nos abre los ojos sobre este tema, o cualquier otro, nos indignamos, nuestra c0nciencia se activa y tuiteamos o hablamos con nuestra pareja. Nos vamos a la cama, que para eso lo ponen en Prime Time, y al día siguiente queda un pequeño eco en nuestra memoria. En cuanto tenemos que echar gasolina al precio que está, comprar algo que acaba de subir o nuestro jefe nos suelta un marrón todo pasa y nuestra conciencia vuelve a hibernar.
Hasta el próximo Salvados, documental sobre los niños que mueren de hambre en África o charla con un amigo que se ha quedado en paro. Ahí se vuelve a desperezar nuestra conciencia pero cuidado que no se acostumbre mucho. La conciencia mejor dormidita al fondo del cerebro que como de mucho la lata, ufff, que pesadez.
Buenos días Dani, tu post has sido otro zarandeo hacia nuestras conciencias para que se mantengan despiertas.
Yo creo que todas las movilizaciones, manifestaciones, etc., si que cuentan, quizás los poderes actuales son muy resistentes a ellas (por no decir caraduras o sinvergüenzas), pero insisto, si que cuentan.
La historia nos ha enseñado que los grandes cambios sociales han venido tras revoluciones más o menos pacíficas. Si no fuera por ellas quizás las mujeres no tendrían derecho al voto, los salarios estarían por los suelos (más aún), las 40 horas semanales no habrían llegado, los matrimonios gays no serían legales, etc. y muchos etc.
O quizás todo esto si que se habría conseguido, pero con muchos años de retraso.
Yo animo a que la gente siga movilizándose, pacíficamente pero movilizándose por lo que cada uno considere justo, al final todo llega, pero nadie lo da gratis (de ahí la importancia de las crucificadas huelgas).
Mañana mismo, día internacional del trabajo, he quedado con unos compañeros para almorzar y después acudir a la manifestación de Valencia, por qué? Porque creo que hay mucho que cambiar y mejorar.
Seguramente no estaré de acuerdo con la mayoría de consignas y pancartas de la manifestación, pero creo que es importante acudir y sumar.
Saludos a todos.
Debería haber mucha gente como tu, Juan. Como vosotros en general. Acabo de comentar con Patxi por twitter que esta desconfianza y falta de «credibilidad» en la gente es con la generalidad, pero sé y me siento afortunado de contar con gente como vosotros aquí, por twitter, en mi vida 1.0.
Ojalá se consiga algo mañana, o que el día 3 se mueva algo en Valencia con la tragedia del metro. Ojalá vuelva a haber una revolución. 6.200.000 parados deberían unirse y montar una revolución de las de verdad.
Saludos.
Totalmente de acuerdo Dani.
Como ya dije en Twitter…estamos acomodados y aborregados en todos los asuntos hasta que nos afecta en primera persona.
Es igual que las campañas que se hacen en Navidad, que pasa durante el resto del año.
Estamos manipulados desde los políticos hasta por los propios medios de comunicación y el problema es que lo sabemos porque seguimos votando a los mismos y compramos los mismos periódicos.
Solución, buffff, ahora no es el momento…hay fútbol ésta noche (IroniaON)
Fina ironía la tuya 😉 aunque desgraciadamente es así. Leí el otro día un twit, más o menos así.
– Que asco de paro. Hay que hacer lo que sea para acabar con esto.
– Hola, soy el hada maravillosa y con mi varita te concedo un deseo.
– LA REMONTADA!!!!
– Pero el paro…
– LA REMONTADA, COÑO!!!
Pues eso 🙂
Muy de acuerdo con todo lo dicho Dani, y me viene al pelo una canción nueva que escuché ayer en youtube; sé que no es tu tipo de música, pero el título y la letra lo dicen todo: Basta Ya!!!
!!http://www.youtube.com/watch?v=LT-3__jaY0Q&feature=youtu.be
Comienzo diciéndote que no estoy de acuerdo contigo en lo de «Salvados». Actualmente es uno de los programas más valientes de la TV, y no se trata de un programa en el que seis contertulios de izquierdas se ponen a debatir y a sacar los colores a la derecha ni nada parecido. Es un programa de entrevistas, y si lo has seguido con asiduidad sabrás que muchas veces un entrevistado presuntamente metido en algo feo se ha visto con la mierda hasta el cuello, a merced del amigo Évole. Así que la «demagogia» del programa es la que quieran dar sus entrevistados con sus respuestas, nada mas.
La segunda parte, el cabreo monumental. Cada vez que nos reunimos la pandilla de amigos, arreglamos el mundo. Nos tomamos unas cervezas, nos ciscamos en la madre de diez políticos, tres empresarios y cuatro banqueros, y sí, nos cabreamos. Pero no creo que ese cabreo que sentimos tanto mis amigos como yo mismo o tú, o el conjunto de la sociedad, sea estéril. Aunque cabree, hay que saber las cosas. No porque vaya a servir de algo, sino porque al final del camino la indignación y el cabreo serán tales que lo mismo un día se obra el milagro y todo el pueblo Español se pone de acuerdo para desalojar por las buenas o por las malas a los hijos de fruta que nos sorben la sangre amparados en las urnas o en una comisión bancaria. Es más fácil ser ignorante de todo lo que ocurre y vivir feliz y contento, pero es te convertirá en el esclavo más eficiente, que va del punto A al B cada vez que se lo manden los de arriba. Vale la pena cabrearse y darse cuenta de que éste país está gobernado por miserables sabandijas para sacar las fuerzas desde la indignación para empezar a combatir por algo. La alternativa a esto es que nuestros hijos vivan y trabajen como los pobres que murieron en Bangladesh al derrumbarse una fábrica textil, de esos de céntimo la hora. Y nos encaminamos a eso, sin ánimo de acojonar.
Yo no se tu, Daga, pero yo voto por seguir cabreándonos e identificando a los bastardos malnacidos que merecen un escrache permanente en sus cojones. La sumisión total y una población sin cultura y desinformada es el sueño dorado de la política actual. Y ese no seré yo. Sí, me seguirán robando, pero al menos tendré conciencia de ello para poder cagarme es sus putas madres. Lo que pase después, Dios dirá.
Un saludo, amigo. Gran artículo (y Gran, porque me has inflamado!)
Buenos días don Daniel.
Otro día más discrepo contigo y soy más de la reflexión del amigo Juan (voleufememal).
Claro que sirve de algo nuestros pequeños cabreos, el problema es que queremos los cambios ¡ya! a la misma velocidad con la que corre la tecnología.
Pero los cambios sociales importantes se toman su tiempo, y cambiar la mentalidad de política y responsabilidad social en España, tardará un poquito,,,pero llegará! eso espero!!
Paciencia compañero (,,y no soy Rajoy ¡eh!)
Un abrazo maestro Daniel!!
Hola Daniel
Yo no sé lo que hay que hacer para que cambie algo, pero está claro que algo hay que hacer.
No sirve con que dimitan si antes no devuelven lo que han esquilmado, porque vendrán detrás otros que esquilmarán más.
Mi propuesta es que quien robe, lo devuelva y si no a la cárcel hasta que lo haga.
En este país parece que todo vale y las protestas se quedan en un ruido molesto, gritemos más fuerte a ver si les dejamos sordos por lo menos.
No tengo mucha confianza en que vaya a cambiar algo. Mejor esperaremos a próximas elecciones para cambiar de perros, a ver si aquellos muerden menos que estos, pero morder, morderán.
En cuanto a la tragedia del metro, solo puedo mandar mi apoyo y desear que nadie manipule la verdad. Un abrazo.
__________________Cyrano.
buenas noches daniel
estoy deacuerdo contigo cuado vemos un programa como el de salvados el domingo a todos se nos revuelve la conciencia.pero nuestros problemas del dia a dia hace que se nos pase.
pero yo si creo en el ser humano y que a base de protestas y manifestaciones al final se consigue cambiar las cosas. cuesta trabajo y tiempo pero se consigue.
un saludo
Hola Dani, en este post no puedo estar MÁS en desacuerdo contigo, suscribo todo lo que han dicho voleufermemal y Lord Naranja, vale que el programa su más inmediata reacción es un cabreo monumental que no sabes cómo canalizar, pero es un programa que nos está abriendo los ojos de muchas cosas que pasan en España.
Ante todo tengo que decirte que yo soy MUY de «»ande yo caliente ríase la gente»» que quiero decir con esto, que mientras no me toquen lo mío y lo de mis allegados todo va e irá bien, eso si también soy mucho del «ojo por ojo diente por diente» y creo que con ese refrán te lo digo todo. Eso si ante estas cosas no entiendo como la gente tiene «tan poca sangre» será que yo tengo la sangre caliente y el que me la hace me la paga con creces.
No me puedo poner en la piel o situación de lo del metro de Valencia o cualquier otro tipo de accidente, pero una cosa si te puedo asegurar el «»»»señor»»»» Cotino y pongo «»»»señor»»»» donde tendría que poner un insulto bien gordo, pues el tal Cotino ese, si algún familiar mío estuviera entre las víctimas o afectados por ese ACCIDENTE EVITABLE según palabras del maquinista que entrevistaron, te puedo asegurar que la sonrisa esa que mostro al final de la entrevista no la tendría y si la tuviera seria con una dentadura reconstruida. Algunos pensareis que violento, pues no o si no se eso va a opiniones, pero si alguna cosa he aprendido en la vida es a defenderme y defender lo mío. Si vas de bueno por la vida te toman por «tonto» no pasa nada por enseñar los dientes.
También defiendo lo de los demás, Ejemplo: hace unos años haciendo un voluntariado en un sitio para gente mayor, por estas fechas, los abueletes/as comentaban que ellos NO tenían que hacer la declaración de la renta por esto, por aquello, porque en la propia delegación de hacienda les habían dicho que NO, pues bien les dije que por pedir el borrador no perdían nada y cuál fue la SORPRESA que a muchos de ellos les devolvían y bastante, cerca de los 1.000 euros y desde entonces cada año les pido el borrador y si sale a devolver pues la confirmamos y si sale a pagar como «NO» la tienen que hacer pues directamente a la papelera. Para que veas como lían a la pobre gente mayor. A fecha de hoy llevo pedidas más de 50 borradores, todo esto lo hago altruistamente, ya que no me gustan las injusticias.
Tomo mi apoyo a los afectados por el metro de Valencia.
Un saludo Dani.