Tiempos pasados
Ya sé que la pregunta es típica y quizás tópica pero ¿cualquier tiempo pasado fue mejor? Llevo dando vueltas al tema desde que hace unas semanas estuvo un amigo de los de toda la vida (mi amigo de toda la vida) y estuvimos recuperando el Soul Calibur original, el de la DreamCast. Por circunstancias ajenas a mi voluntad no tengo ya la DreamCast pero afortunadamente ese juego se reedito para XBOX 360 Hace unos años y por supuesto lo compré.
A ver, para los que estéis perdidos: hablo de videojuegos y hablo de un videojuego que el año que viene cumplirá 20 añazos, ahí es nada. Hablo de un videojuego de lucha con espadas. Hablo del videojuego que sin duda más horas nos ha tenido despiertos a mi a migo y a mi dándonos mamporros mutuos. Hablo de que ese juego además nos crea una conexión especial donde se demuestra que la telepatía existe. Eso y que nos conocemos al milímetro y no podemos evitar saber lo que va a hacer cada uno en cada instante. Por instinto. Podía hacer 5-7 años que no jugábamos a ese juego, puede que más, pero ahí sigue en nuestro subconsciente la conexión, el recuerdo de los movimientos, los trucos, el disfrute… Y todo esto me lleva estos días a la pregunta: ¿Cualquier tiempo pasado fue mejor? Pues no sabría decir pero en este sentido…
A ver, gráficamente el juego deja ya que desear. 20 años a nivel gráfico en los videojuegos es un mundo. Se acaba de presentar Soul Calibur 6. Gráficamente ya está a años luz. Seguro que el ojo de un personaje nuevo tiene los mismos polígonos que cualquier personaje del Soul Calibur original, pero yo ya estoy seguro de que le faltará algo y sé lo que es: chispa. Así de fácil.
Mi amigo y yo terminamos una partida y en menos de 10 segundos ya estamos jugando otra. Fácil, sin apenas tiempos de carga, sin mil millones de opciones, sin dos mil personalizaciones, sin filigranas, sin estrategias, sin magias, sin poderes. Rapidez. Eso echo en falta a cualquier juego de hoy en día. Esa sencillez, ese estar destinado a jugar y divertirse, no en convertirse en «una experiencia memorable». Para experiencias ya tengo la vida. Quiero jugar.
Este juego es el caso extremo pero, en general, nos pasa con casi todos los juegos. Confieso que a mi más. Hace años que no disfruto un nuevo juego como lo hacía antes. Exprimiéndolo al máximo, buscando secretos, deseando llegar a casa para encender la consola o el ordenador. Yo no sé si soy yo o son ellos pero algo pasa que acabo volviendo a los clásicos.
No sé si a vosotros os pasa pero cuando tengo algo en la cabeza me suelen llegar muchos estímulos externos. Andaba con estos pensamientos y leo en twitter esta viñeta que veis a la derecha de Sarah Andersen. Es la viva expresión de lo que me sucede. Me apetece probar cosas nuevas, me apetece jugar a juegos nuevos, descubrir algo como si fuera la primera vez. De hecho si por algo me gusta la tecnología es porque siempre hay cosas nuevas con las que experimentar. No me considero una persona que me guste anclarme en el pasado. Siempre me gusta el cambio y me gusta tener la mente abierta para aprender y disfrutar. Sin embargo, como Sarah, acabo encaminándome siempre hacia lo de siempre.
Quizás es la comodidad, lo conocido da cierta tranquilidad, la sensación de que es algo que funciona, que ya sabes que te gusta, que no requiere esfuerzo ni posibilidad de frustración. Con la música me pasa como con los videojuegos, siempre acabo haciendo como Sarah y escuchando mis listas de Spotify por más que a veces me de por probar sus recomendaciones. Con los libros incluso. Ahí ando re-leyendo It por tercera o cuarta vez en mi vida. Libro que, a mi ritmo, me lleva meses y sin embargo vuelvo a él en vez de descubrir algunos de los infinitos libros que me quedan por leer en esta vida.
¿A vosotros también os pasa que cualquier tiempo pasado fue mejor? Que ya no se hace música como la de antes, que las películas de hoy en día no tienen el carisma de las antiguas, que los videojuegos no son tan divertidos, que en la tele ya nunca ponen nada bueno, que los chicles de hoy no saben como los Boomer…No sé. Y si empecé hablando de videojuegos, permitidme acabar con una cita del mismísimo Gabriel García Márquez que me he encontrado esta mañana en twitter y que quizás sea la explicación a porque todo lo pasado nos parece mejor.
La memoria del corazón elimina los malos recuerdos y magnifica los buenos, y gracias a ese artificio, logramos sobrellevar el pasado.
¿A vosotros que os parece?
ciertamente echo algo de menos los años 80 sobre todo,la musica,el cine,las discos y que era mas facil ligar que ahora,estamos en unos tiempos en que no puedes casi ni decir un piropo a una mujer (piropos, no groserias) sin temor a que te tachen de machista o algo peor,ademas las pesetas daban para mucho mas que los euros,con 5000 pesetas eras casi como un rico,daban para mucho mas que ahora con 30 euros
Ahora ni 50 euros dan como las 5000 pesetas de finales de los 90. Pero bueno, habrá que acostumbrarse. A mi también se me hace raro tanto cambio pero igual que con los euros, no os queda otra que acostumbrarnos… y seguir escuchando nuestra música.
¡Pues yo de vez en cuando desenpolvo la Xbox y la MegaDrive (hasta la Atari) y, sinceramente, lo paso muy bien con ellas, pero no creo que fueran mejores maquinas que las actuales, aunque estoy hasta los h…. de las actualizaciones y parches de esta generacion, el OutRun y el After Burner me parecen maravillosos (en su momento) pero creo que cualquier tiempo pasado fue pasado, a coger lo bueno y a capear lo malo de cada tiempo, un abrazo Dani
Totalmente de acuerdo. El último juego que me engancho de verdad fue el Need for Speed Undercover. Y para rejugar y disfrutar, los Max Payne 1 y 2. Lo mismo ocurre con peliculas, series, libros, musica… A veces apetece más revisionar una que te encantó en su día que descubrir una de las tantas buenísimas que hay ahora.
Y, porsupuesto, ahi esta la MAME para regresar por un rato, a la infancia y juventud…