¿Eres feliz?

¿Eres feliz?
NoMeDejes
Portada de No Me Dejes, de Màxim Huerta

DagaNota: Lo primero avisar que esto son reflexiones. No pretendo ni aleccionar, ni adoctrinar, ni hacer de esto un post tipo post-it (valga la redundancia) que es como yo llamo a esos mensajitos que se cuelgan en Facebook con frases de Paulo Coelho o slogans tipo Nike de los de «nada es imposible» pero son mis reflexiones, las cuelgo en mi casa virtual y cada cual que las tome con medida y precaución. Allá vamos con la preguntita.

¿Eres feliz? Nadie me había preguntado eso jamás de los jamases. Hace unos meses, no muchos, me la hicieron por primera vez y desde entonces la pregunta me persigue. O quizás siempre me ha perseguido pero nunca me había dado cuenta, también es posible, que uno va de un despistado por la vida que no veas. O también es posible que desde entonces haya empezado a hacérmela a mi mismo con asiduidad y cualquier cosa me la recuerda (Inciso: hubo una época, hace muchos años, en que cada noche me acostaba preguntando al aire «¿Me quieres?». A nadie en concreto, sólo al aire. No tenía nadie más allá de la familia que sintiera que me quisiera. Supongo que deseaba poder hacer ese pregunta a alguien y de alguna forma soñaba con ello. Fin de la cita-inciso)

…me hice la pregunta que todos nos deberíamos hacer a diario: ¿soy feliz?

Esta frase la encontré en un libro hace unos días, ahí persiguiéndome. No digo el libro porque no lo recomiendo especialmente, no es el de Màxim de arriba. No, no me la he hecho a diario y creo que nunca me la había hecho, menos aún me lo habían preguntado. ¿Eres feliz? Desde entonces me lo pregunto a menudo. Pero para responderme mejor he empezado a preguntarme qué es ser feliz. ¿Tenéis la respuesta a mano?

¿Ser feliz es estar todo el día riendo con los amigos? ¿Es levantarse con una sonrisa en la cara? ¿Es contar chistes? ¿Es estar conforme con lo que uno es? ¿Qué es ser feliz? Y añado: ¿Hay grados de felicidad

  • ¿Eres feliz? – Le pregunté a un compañero de oficina unos días después de que me hicieran la pregunta
  • Moderadamente feliz –  Me contestó sonriendo

Luego me ha confesado que es una frase sacada del gran Aberasturi, que solía terminar los programas despidiéndose con un «Sean moderadamente felices». Buena referencia, pero implica que uno puede ser muy feliz, poco feliz, moderadamente feliz… no creo. Soy binario. Se es feliz o no. Es de esas cosas que voy descubriendo en mi búsqueda de la respuesta a esa pregunta.

Al final voy llegando a la conclusión de que la felicidad no es un estado de ánimo sino más bien una decisión. Uno decide ser feliz, porque todo depende de como lo mires, lo enfoques, lo asimiles. Puedes buscar la parte negativa o tomar sólo aquello que te hace feliz. Yo suelo usar un truco muy absurdo. La cabeza tiene una capacidad limitada. En mi caso bastante limitada. Si se empieza a llenar de pensamientos que no me hacen feliz me dedico a llenarla de otra cosa para que esos pensamientos se tengan que ir. Aunque sean pensamientos en blanco. A mi me funciona.

Y es que ser feliz lo decide uno a cada instante y en cada instante se puede ser feliz. No sé es feliz per se. Y por supuesto la felicidad se busca. Yo he de confesar que tengo tendencia a la negatividad pero me esfuerzo cada día por no ser así y busco ser feliz siempre en cada detalle. La encuentro en una noche oscura en casa a la luz de dos velas escuchando música sin hacer nada más que eso, pero también la encuentro en pasar una hora leyendo en el Palmeral de las Sorpresas un sábado por la mañana el libro maravilloso que he puesto en la foto y dejando perder de vez en cuando la vista en las muchas personas que, como yo, disfrutan el tibio sol de otoño.

Si, a veces es jodido ser feliz. A veces el truco de vaciar la cabeza no funciona porque hay algún atoro en el desagüe. Ciertos pensamientos se aferran y no hay narices de quitarlos pero todo es cuestión de buscar un buen desatascador que las arranque de ahí. Y más cuando son cosas contra las que no puedes hacer nada de nada.

Sí, la felicidad es una decisión. Y sé que he estado unos días indeciso. Sigo un poco aún, pero voy tomando la firme decisión de ser feliz, de aferrarme a esos pequeños y grandes detalles que me hacen feliz. No dejar que la nube me lleve donde quiera. No. Es mi decisión: ser feliz.

Todas las veces que quieras ser feliz sólo tienes que serlo. No esperes. Sé.

Eso sí está extraído del libro de Màxim. Creo que resume todo este post. No esperes. Sé. No esperes que la felicidad te llegue. Sé. Si quieres ser feliz, sé. Sé feliz a cada instante que tengas ocasión.

Por cierto, igual os ha picado la curiosidad saber qué le respondí a esa persona que me preguntó por primera vez «¿Eres feliz?». Si no os interesa pasad ya al video final. A los curiosos, os cuento que le dije sí. Pero supongo que por lo inesperado de la pregunta y por no habérmelo planteado nunca dije un sí que creo que sonó pequeñito. Y así debió verlo porque me lo ha preguntado después alguna vez más. Y alguna vez he respondido moderadamente, sin demasiada convicción. Otras un más fuerte. Incluso un inmensamente. Al final todo se resume en un Sí. Sencillo. Sin florituras, calificativos ni cuantificadores pero contundente. Pese a las circunstancias, pese a todo eso que me rodea y que me ha tenido unos días tonto. Sí. Soy feliz. Porque tengo razones para serlo y porque me apetece. Y hoy os dejo con una canción porque ayer tuve un «día tonto, de esos que por más que salto toco el suelo pronto» y me toca pedir perdón a quien ha sufrido ese y otros días tontos. Perdón y gracias por la paciencia.

4 comentarios en «¿Eres feliz?»

  1. Lo leí anoche, y me he tirado un buen rato dándole vueltas para contestar como se merece. Mi respuesta: procuro serlo; aunque para ello deba resguardarme en pequeñas cosas como la lectura, la música, el cine/series, una buena charla o conseguir arrancarle a alguien una buena risa. Todo cosas que me hagan olvidar el otro lado de la balanza, en el que está todo lo que me falta, desde un curro hasta ausencias con nombres y apellidos.

    Resulta jodido estar en esa montaña rusa y mantenerse en la lucha por ser positivo, pero como se suele decir: «hay días tontos, y tontos todos los días» Y esos (los tontos) abundan, intentando marcarte cómo debes sentirte y comportarte ante los momentos duros/difíciles…

    En fin, dicen que la vida va colocando cada cosa en el sitio que merece; así que supongo que ese debe ser el camino a la felicidad… cuando todas las piezas, grandes y pequeñas, de la vida acaban encajando; aunque antes haya que repartir y recibir montañas de hostias!!

    Un abrazo!

    • Una amiga común, abogada para más señas, utilizaba mucho ese símil de la montaña rusa emocional. Todos estamos subidos en alguna. Más grande o pequeña pero no estar ahí es no estar vivo. Yo también uso mucho la lectura y series sobre todo para ahuyentar demonios pero sobre todo y ante todo disfrutar todo lo bueno. Ser felices está en nosotros!

      Abrazo fuerte Jordi!

  2. Yo creo que no se es feliz o infeliz. Todo son etapas y momentos. Y cuantos más momentos felices haya, mejor. Lo difícil es encontrarlos con frecuencia.
    Dice una canción de Mago de Oz:

    No es más rico el que tiene más,
    si no el que menos sabe necesitar,
    Y si tu tienes a alguien junto a ti..
    Rico seras.

    No creo que sea necesario tener a alguien junto a ti para ser feliz, aunque ayude.
    Pero si aprovechar al máximo cualquier momento de felicidad y darlo todo.
    No sabes cuando volverá el proximo…

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.