#EnElMetro

#EnElMetro

Sin permiso ni nada, me permito la licencia de coger prestado el #EnElMetro, que tantas alegrías me da, de la amiga @Lacerme. ¡Eres grande Ana! 

¿Os había dicho alguna vez que mencanta viajar #EnElMetro? Me parece un medio de transporte moderno, rápido, ecológico, puntual, efectivo… para mí todo son ventajas en el uso del metro y ojalá mi ciudad tuviera muchos más kilómetros y pudiera usarlo a diario.

Y el tren de cercanías, que no hace mucho lo he cogido, también mencanta. Me parece fabuloso. Lo he usado mucho cuando he estado en Copenhague. Allí aunque tienen metro, y van a tener mucho más en breve, el tren ha sido durante años un grandísimo medio de transporte. Cercanías y medias distancias allí son como las lineas de metro aquí. Mencanta moverme en tren, lo reconozco.

Hace poco he estado en Cadaqués, como bien sabéis los que habéis sufrido mi paliza por Instagram, y a la vuelta cogí el cercanías desde el aeropuerto de Málaga a casa. La ida fue igual, pero fue especialmente en este trayecto de vuelta cuando me di cuenta de lo mucho que me gusta. Esos viajes en cercanías son como viajar #EnElMetro, pero uno más grande. Miraba alrededor y veía historias. El tren permite eso, permite que la gente se siente unos frente a otros, unos de pié y otros sentados, en grupos, mantener conversaciones cruzadas unos con otros. Y me parece maravilloso. Eso no se da en un autobús.

El tren, o el metro, permite esa «socialización». Permite fijarte en los demás. Escuchar de que hablan (bien lo sabe la amiga @LaCerme que nos comparte las historias que escucha #EnElMetro). Ver lo que leen. A veces escuchar o intuir lo que oyen. Permite a la gente estudiar y trabajar. Se cruzan muchas historias #EnElMetro o en el cercanías y la imaginación se desborda. Al menos la mía.

Viajar en metro me hace sentir urbanita, me hace formar parte de la ciudad, me hace sentir su ritmo, ver como anda, qué palpita. Se siente mucho en el metro. eres parte de un algo de esa ciudad.

Hace ya casi tres años me fui con una de mis sobrinas a ver en Madrid un concierto de los Rolling. Llegamos a Madrid, dejamos las cosas en el hostal, comimos algo y nos fuimos pronto para el concierto. Por supuesto #EnElMetro. Estábamos lejos pero a medida que nos acercábamos a la estación que estaba cerca del Estadio el vagón se iba llenando de gente acicalada para la ocasión. Camisetas de conciertos anteriores, camisetas con la famosa lengua, chapas de Los Rolling, caras pintadas. Ibamos viendo en cada estación como más y más gente se unía al grupo. Nos mirábamos y reíamos emocionados. Y de repente de algún lugar del vagón de metro comenzó a sonar el «uh uh» del Simpathy for the Devil. Para los no iniciados, os dejo la canción. Tenéis ese grito de guerra más o menos a partir del minuto 1:50. A partir de 2:50 en más plenitud con el sólo de guitarra de fondo.

Sonaba muy suave, lo cantaban dos o tres personas. pero la ola se iba extendiendo por todo el vagón, por todo el tren. Nos mirábamos unos a otros, totales desconocidos, y tarareábamos ese UH UH una y otra vez en bucle. Los que entraban en las últimas estaciones ya encontraban el espectáculo y se unían rápidamente. Ya era un grito unánime en todo el tren. Eramos parte del grupo, éramos los afortunados que íbamos a ver a los Rolling. Era una sensación maravillosa que aún hoy me pone los pelos de punta.

Esa sensación, obviamente no tan intensa, me da compartir metro con otras personas. Me hace sentir que compartimos unos minutos de nuestra vida. Y me gusta. Ojalá pudiera usarlo mucho más pero siempre que tengo ocasión, ahí que voy.

2 comentarios en «#EnElMetro»

  1. Mira, de las pocas cosas que hecho de menos de lo de vivir en la ciudad es el metro, me encantaba el dejar el coche en casa y no preocuparme de nada, llegas a la hora, lees el periodico, te fijas en los otros, a veces interactuas con ellos, de hecho para las carreras en Valencia si vengo a correr solo aparco en la periferia y cojo el metro con los otros corredores, algunos siempre son mas abiertos y comentamos las cosas, oto ambiente que en el autobus solo

    • Totalmente de acuerdo. La última vez que tuve que ir a Madrid en coche lo dejé en aluche, en la primera boca de metro que pillé, y ahí se quedó 3 días. Siempre me movía en metro

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