Ingrid goes west

Ingrid goes west

Hace unos días escuché a Emilio Cano, Emilcar para los que escuchamos sus podcasts y leemos su boletín, dedicar un episodio a la película que da título a este boletín: Ingrid se va al Oeste. No es normal que dedique un episodio a series o películas así que me interesó lo que comentaba. Habló especialmente de como se muestra el uso de Instagram por parte de la chavalería y me interesó aún más.

¿Dónde se puede ver la película? En SkyShowtime. Tenía pendiente ver si me apuntaba aprovechando esa oferta del 50% de descuento de por vida si contratabas en esos meses de lanzamiento así que fue la puntilla. Total, 3€ al mes no me van a sacar de pobre así que contratado y vista la peli.

Para empezar, decir que no estoy muy de acuerdo con Emilcar. Aunque se vea Instagram realmente no se ve nada de lo que él comenta en su podcast. De hecho, es una película de 2017 e Instagram ha cambiado muchísimo en 6 años. Habla mucho Emilio de las Stories y en la película ni aparecen porque estaban recién lanzados y no tenían mucho tirón aún. Instagram es básicamente una excusa para el resto de la película pero hay un par de cosas, que salen completamente de pasada, y que sí que me parecieron interesantes.

Ojo, que hay spoilers como la copa de un pino en la última parte de este boletín pero te aviso antes para que no lo leas si no te gustan y quieres verla.

Adicción a las redes

La película comienza con Ingrid, nuestra heroína, llorando desconsolada en un coche mientras alguien que sigue por Internet se está casando. Vamos descubriendo que está justo al lado de donde se celebra la boda, sale del coche, se acerca a la novia y le suelta gas pimienta en la cara mientras le espeta algo como “Éramos amigas, ¿porqué no me has invitado?”.

De ahí vemos como es detenida e ingresada en un centro psiquiátrico, se supone que para quitarle la adicción a las redes porque vamos deduciendo que en realidad ni amigas ni nada, simplemente era alguien a quien seguía en redes y estaba obsesionada.

No considero nada de esto spoiler porque básicamente son los 3 primeros minutos de la película. Y este es precisamente un punto que me parece interesante, el tema de la adicción a las redes sociales, al móvil o similar, y como se trata en un centro especializado. No es algo que haya visto por ahí. Se ve que la medican y es de suponer que le quitan el móvil pero … ¿Qué más hay ahí? ¿Cómo se trata eso? ¿Cuanto dura? Ya te digo que sale como 30 segundos en la película pero de repente me pareció un tema muy interesante.

Por cierto, le hicieran lo que le hicieran no sirvió de mucho porque en cuanto salió de allí y le dieron el móvil se volvió a enganchar, que de eso va toda la peli, de su nueva obsesión.

El gran spoiler

Avisado quedas: toda esta parte es un gran spoiler del final de la película así que si no quieres saberlo, pasa al siguiente punto.

El resto de la película pasa sin pena ni gloria contando la obsesión de Ingrid con una influencer. Como se acerca a ella, entra en su vida, la va conociendo… nada que no hayamos visto de una u otra manera en otras películas tipo atracción fatal o La mano que mece la cuna, aunque aquí en tono de comedia un tanto negra a veces. Se deja ver, sin más. Pero el final me parece tremendo.

Tras descubrirse todo el pastel y que la influencer la mande a la porra, nuestra querida y Ingrid no tiene nada mejor que hacer que encender un puñado de velas, grabar un video en su Instagram que si blablablaba (ni recuerdo lo que dice) y tomándose un montón de pastillas. Se tumba y… siguiente escena en el hospital.

El “novio” ha visto el video, ha llamado a la policía y la ha salvado. Tachán. No lo podíamos esperar. Y hasta aquí bien, pero el pseudo novio le cuenta que su video se ha hecho viral, que tienen miles de seguidores, miles de mensajes de apoyo, bla bla bla. Y él feliz y ella feliz. Créditos y fin de la película.

Y me parece tremendo. Me parece una especie de alegato a favor del suicidio brutal. Una forma de decir que cualquier cosa vale si al final consigues seguidores o algo así. No es que me guste la moralina especialmente pero me parece que el tema es lo suficientemente serio como para que lo dejen de esa manera. Y más cuando vemos que la gente es capaz de cualquier cosa con tal de conseguir likes y viralizar sus videos.

Lo hubiera dejado en esa parte en que se salva, por dejarle un final feliz, pero me sobró todo el tema de que se hiciera viral ese video. Opiniones, como las croquetas, hay para todos los gustos.

En definitiva

Ingrid, por mucho que se mude al oeste, está zumbada, ese es el mensaje con menor o mayor acierto de la película y que te puede entretener más o menos. Poco más de 90 minutos para pasar el rato y que te deja con la extraña sensación de que toca muchos temas que podrían ser interesantes, no sólo estos dos que te he contado, en los que no profundiza nada para conseguir algo mucho más comercial y “para todos los públicos”. Así pasó sin pena ni gloria hace unos años y así seguirá. No creo que se vaya a convertir con el tiempo en una película de culto.


Cositas de Málaga

Es curiosa esta palabra porque lo que en Málaga llamamos “hacerse la piarda” tiene infinidad de nombres en España. Parece como que se ha buscado siempre la forma de decir con algún tipo de clave eso de saltarse una clase. Ya sea para irte a la cafetería, al bar, para volverte a casa o estudiar. Sea como sea, saltarse una clase en Málaga, lo que habitualmente se llama hacer pellas por el resto del país, aquí es hacerse la piarda. Nada que no hayamos hecho cuando estudiábamos.


La imagen

Me ha dado por montar un estudio de todo a 100 en casa. Una lámpara de escritorio de IKEA que tenía, una de pie que también tenía y un par de linternas. Sólo he comprado un trozo de tela negra de fondo para poder aprender a jugar con la luz. Aquí tienes 4 imágenes con el mismo encuadre en la que sólo cambia la iluminación. Y lo cambia todo.


La recomendación

Déjate llevar por el algoritmo musical de YouTube. De vez en cuando pongo algún video musical en Youtube. Normalmente de clásicos de toda la vida para mi. A partir de ahí me dejo llevar. Voy viendo lo que me recomienda para ver a continuación y voy seleccionando cualquier de ellos. Y cuando me quiero dar cuenta han podido pasar 2-3 horas. No suelo descubrir nada, sólo viajo en el tiempo a visitar viejos conocidos, pero es una sensación muy agradable. A veces está bien dejarse llevar y es lo que te recomiendo esta semana.

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