Y como cada año, toca post de despedida y desear un feliz 2020. No va a ser extenso porque creo que la palabra que más podría definir mi 2019 es anodino. Tenía muchas buenas intenciones cuando comencé, eso de los propósitos de año nuevo, pero se han quedado casi todos en nada.

Ha sido un años con bastantes luces y sombras, supongo que como todos. No sé si más luces que sombras pero si un año que en muchos aspectos considero perdido, de ahí lo de anodino. Ha provocado cambios sobre todo al final y me da la impresión de que 2020 será un año más interesante.

Algunas escapadas previstas, ganas de viajar a lo conocido y a lo desconocido, ganas de reencuentros, ganas de volver a activar cuerpo y mente, ganas de cambio y de 2020.

Por lo demás, lo de siempre: pedir perdón si alguien se ha sentido ofendido por alguno de mis post, twits, estados de instagram o lo que sea. Todos han sido escritos con buena intención y sin ánimo de ofender pero si alguien se ha sentido mal, mis más sinceras disculpas.

Espero que este 2020 nos veamos más. Espero tener algún reencuentro en persona (casi un año ya que nos vimos la última vez no puede ser, Kris). Espero ver más aún a una persona cercana que, por circunstancias, no nos vemos todo lo que me gustaría. Espero pegarme alguna escapada y espero que 2020 traiga cambios para bien.

Estimulante se presenta, con retos ya en marcha y los que vendrán. Y espero que el año que empieza en un ratito sea para vosotros un gran año. Que tengáis diversión, buena gente en vuestro día a día, desafíos que estimulen cuerpo y mente. Y espero que nos sigamos viendo mucho.

Besos y abrazos por doquier a todos y a todas.

Feliz 2020