No sé si alguna vez le habéis preguntado a Alexa, o a Siri, o a Google, si os quiere. Según me dice Amazon, es una de las preguntas más habituales en los últimos días. «Alexa, ¿me quieres?». Y no he querido preguntarle a mi Alexa pero es posible que se convierta en algo más habitual de lo que podría pensarse. Quizás tengamos que cruzar la linea entre Inteligencia Artificial y Emoción Artificial.