Diógenes laboral

Diógenes laboral

VelaPuede que tenga algo que ver con lo que comentaba el otro día de mi vida nómada pero en general no me gusta nada esa gente que acumula y acumula papeles y cosas que sabes que van a ser inútiles en el trabajo. Ya sean papeles, documentos, bolígrafos que no pintan en el cubilete de la mesa o documentos en el escritorio informático. Yo lo llamo Diógenes laboral. Seguro que todos conocéis a alguien que sufre Diógenes laboral. A mi no me gusta acumular nada que no me aporte algo.

Son esas personas que todo lo imprimen. Correos, PDF adjuntos, copias de cualquier memorandum, notas a mano… Esas personas que archivan hasta la publicidad que viene con la factura de la Luz por si un día necesitas instalar placas solares en tu oficina, aunque en tu oficina no de jamás de los jamases el sol, o imprimen hasta los correos electrónicos como si pretendieses escribir un diario a base de mails.

Esas personas que imprimen un borrador de un documento, hacen correcciones, vuelven a imprimir una vez pasadas las correcciones al ordenador pero no rompen el primer borrador. Lo archivan. Y así se encuentran con 20 versiones del mismo papel y lo que deberían ser 3 folios impresos a doble cara se convierten en un tocho enorme sujeto con interminables clips que no paran de salir volando, grapas y todo tipo de dispositivos que sirvan para intentar mantener unido todo aquello que debería estar en el contenedor de papel para reciclar o incluso nunca debieron salir de su hábitat digital

Esas personas que no les basta con escanear un documento y guardarlo digitalmente. O consultar el extracto bancario en la web, contabilizarlo y saber que lo tienes ahí, a tu disposición, para consultarlo/imprimirlo cada vez que lo necesitas. No, lo imprimen y archivan.

Soy un tipo tremendamente fetichista para muchas cosas. Soy capaz de guardar como recuerdo un post-it con una nota graciosa que me deja alguien. Una servilleta con unos garabatos. La flor de papel que ilustra este post, hecha hace años y años con una servilleta, puede llevar en mi caja de recuerdos tranquilamente 20 años. Quizás en ese sentido podría decirse que tengo «Diógenes emocional». En cambio en lo laboral, todo me sobra. Todo me estorba. Me gusta trabajar en entornos de trabajo despejados y que los papeles sean los justos e imprescindibles. En eso cumple un papel primordial la informática.

Todas las herramientas digitales de las que disponemos hoy en día son increíbles. Para mi es mucho más cómodo buscar un documento bancario a través de la web del banco que andar mirando en carpetas hasta encontrarlo. Es mucho más limpio, rápido, ecológico… Es maravilloso.

Lleva latente este post en mi cabeza unos días, fruto de mi mudanza laboral, y hoy se ha decidido a salir fruto de la lectura de este post de ThinkWasabi. 10 sencillas ideas para mejorar tu espacio de trabajo. Orden y espacio son las claves que saco en conclusión. Os recomiendo fervientemente su lectura. Y pensad si vosotros podéis sufrir ese síndrome de Diógenes laboral o alguien de vuestro entorno. Intentad ayudarle o ayudaros. Querer es poder.

Por unos espacios de trabajo libre de cosas innecesarias.

9 comentarios en «Diógenes laboral»

  1. Me recuerda a una persona muy, muy cercana acostumbrado a cuando se trabajaba en papel y le cuesta adaptarse a todo lo digital.

    Tienes razón y, a parte de temas ecológicos, es sencillamente práctico… menos es más, todo disponible en un par de clicks y no pelearte con archivadores lleno de papeles!!

    Un abrazo!!

    • Exacto. Quizás es gente de la «vieja guardia» simplemente. Aunque no seamos nativos digitales muchos si que nos hemos adaptado bien a la era digital. A muchas otras personas les ha costado más trabajo o simplemente no lo han hecho.

      • Además, siguen guiándose por eso de si no está en papel no existe; o usan el word como una vieja máquina de escribir (luego toca corregir textos) y un largo etc.

        😉

  2. Yo tengo un fallo parecido, la mesa del trabajo y el pc los tengo mas que limpios, ahora, lo que cae en el maletero del coche… eso se puede tirar ahi hasta que le crezcan flores (y la de revistas que acumulo ni te cuento, cuando hoy en dia casi todo lo acabo leyendo por pantallas) es curiosa esa dicotomia entre la vida personal y la laboral, pero bueno, algun dia me organizare en casa y en el coche

    • Lo del maletero es más que normal. Total, como no se ve, jajajaja. Yo también lo mantengo más o menos recogido pero es que no lo uso mucho. Ahora si lo que cae ahí puede tirarse semanas o meses.

  3. Pues si. El puesto de trabajo, (aunque hace años que no se lo que es eso) cuanto más despejado, mejor. Ahora bien, la casa es diferente. Cada vez que tiro cosas, revistas… etc lleno dos bolsas. Yo tambien conservo post-its. Me recuerdan bonitos momentos con buenas compañeras de trabajo.

    • Totalmente de acuerdo. Tengo más recogidos y organizados los puestos de trabajo que la casa, pero de este fin de semana no pasa que le meta un meneo importante. Lo peor los armarios. Eso es territorio comanche total!

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