¿Dónde andarán?

¿Dónde andarán?

LibrosAcabo de empezar a leer un libro que me han prestado. Bueno, me han prestado dos pero he empezado por uno que yo soy de una cosa después de la otra. Un libro después de otro. Lo de mezclar… sólo la ginebra con la tónica. La cuestión es que procuro tener todo el cuidado del mundo lo que me prestan y, sobre todo, devolverlo. No me gusta apropiarme de algo que me han dejado con cariño pensando que me va a gustar y menos si se trata de algo como un libro.

Sobre el tema de compartir libros hay mil historias. Leí una vez algo de que cuando ves a alguien leyendo un libro que te gusta es una invitación a conocer a alguien interesante, o algo así. Confieso que me hace ilusión que alguien me preste algo que le gusta y que suele ser tan personal como un libro o una película. Es un pequeño acto de valentía. Prestas algo que a ti te ha gustado pensando que a esa persona le va a gustar pero… ¿y si te equivocas? Es como ese pequeño acto de fe que hacemos cuando damos un regalo pero un punto más personal porque no sólo das algo a alguien, das un poquito de ti.

Y por supuesto cuido esas cosas y las devuelvo, como os he dicho. Y de repente he pensado… ¿Donde andarán todos esos libros que he prestado y que jamás han vuelto? ¿Habrán gustado? ¿Se los habrán quedado de recuerdo porque les han encantado o yacerán penosos en algún rincón? Miro mis dos pequeñas estanterías de libros y pienso… ¿Donde estarán todos los ausentes?

Apenas lleno un par de estanterías. No se si tendré 30-50 libros. Yo que he leído muchísimos más. Apenas hay antiguos. Todos los he ido «prestando». Incluso algunos modernos. No recuerdo a quien. Nunca he sido firme para esas cosas. Ya en tiempos de instituto decidí llevar un listado de los libros que prestaba pero no soy constante. No sé si los que los tengan los verán y se acordarán de mi, lo dudo. Supongo que muchos se los llevaron por no decir yo un no a tiempo. Otros que si he regalado con cariño espero que si traigan recuerdos agradables a esas personas cuando los encuentren. Otros volvieron tras largos viajes, ya os conté que uno estuvo de viaje en Bosnia y espero que hiciera más amenas las guardias a esa persona que se lo llevo.

No soy especialmente fetichista con los libros, no entendáis que es una queja por haberlos perdido. Es sólo que me he acordado de estos viejos amigos y espero que estén bien, allá donde estén, y hayan hecho feliz a alguien como me hicieron feliz a mi. Ya sabéis, reflexiones de nocturnas.

2 comentarios en «¿Dónde andarán?»

  1. No te preocupes q seguro q están todos bien cogiendo polvo en una estantería junto a sus compañeros, y da por supuesto q esas personas se acordaràn de ti a través de ellos, al menos al pasar el plumero. Por cierto, felicidades por tu medio santo. Besos.

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