Hoy hace un mes

Hoy hace un mes

Hoy hace un mesMas o menos a esta hora hace un mes nos dejaba mi madre. El tiempo pasa. Todo lo cura, o eso dicen, pero por ahora el dolor aquí sigue. No a todas horas, no tan intenso, pero duele. Sigue doliendo cuando uno se para a pensar un poco. Sigue habiendo heridas abiertas, papeles por zanjar y cosas por hacer. Entre ellas toca seguir limpiando la casa.

Ojo, entiéndase por limpiar despejar cosas innecesarias, que mi madre Síndrome de Diógenes no tenía, pero tenía pequeñas manías y le gustaba almacenar cosa, por si acaso. Con decir que en el fondo de un armario apareció una lata de fabada que caducó en 1.999. ¡Imaginad desde cuando podía estar ahí! Eso sí, perfectamente conservada, sin óxido ni hinchada ni nada. Que hasta pensé que igual si la hervía…

La cuestión es que en este mes el dolor se calma. He despejado sus armarios, aunque aún quedan cosas, dado su ropa a beneficencia y tirado trastos viejos e inútiles, pero de dentro de los armarios. De momento yo me quedo en casa de la DagaMami y ahora queda la parte que me está costando incluso empezar: re-decorar. No soy muy de decoración, me gusta pero me canso pronto. Pero arregle más o menos la casa, hay cosas de las que debo deshacerme. Esas cosas que llevan siglos en la casa y que mi madre ha ido poniendo a su gusto.

Libros que llevan decorando estanterías años y que dudo que nadie haya leído, figuritas de esas que la gente regala (seguramente alguna hasta se la haya regalado yo), bolas de nieve, fotos de mis sobrinas (sus nietas), trofeos que ganó con mi padre jugando al parchís y al dominó… Mil cosas que hacen que esta casa desde la que os escribo sea la casa de mi madre. Y aunque ella ya no esté se hace tremendamente duro reacondicionar la casa. Sé que es necesario, sé que es uno de los pasos más importantes para superar todo esto. Convertir esta casa en MI casa o al menos en otra casa porque ya, me guste o no, no es la casa de mi madre.

Nunca he sido una persona apegada a las cosas, soy de tirar lo que no sirve o no uso lo antes posible. No me ha costado nada vaciar esos armarios, pero esto es diferente. Es asumir que no volverá a entrar por esa puerta. Que ya no le van a dar el alta en la residencia ni en el hospital. Sé que es así, que es ley de vida y que eso no va a ocurrir. Por mucho que mantenga su sofá, la mesita de sus medicinas o la estantería donde siempre guardaba las Juanolas para tenerlas a mano, no va a volver.

Hoy hace un mes. No la lloro a diario, pero la recuerdo todos los días, varias veces. Y aunque duele menos, sigo llorando de vez en cuando. Pasar página no es nada sencillo. En unos días me desharé de algunas de estas cosas físicas pero ella seguirá aquí, esté o no esté su sillón. Y posiblemente alguna caja de pastillas Juanola si que guardaré. No sé, quizás como homenaje.

8 comentarios en «Hoy hace un mes»

  1. No sabes cómo te entiendo!! Yo lo viví con mis abuelos y lo peor es lo que comentas, rehacer una casa. En el caso de mi abuela materna te puedo decir que no ha redecorado la casa hasta hace poco y aún siguen estando esos libros de mi abuelo en la casa y que nadie a vuelto a leer.

    Es esa sensación de apego y seguridad el seguir viendo esas cosas las que hacen que se conserven; nosotros los jóvenes somos más prácticos y nos deshacemos de ellas como tú dices, en cuanto son innecesarias.

    Mucho ánimo!!

    • Pero es curioso lo innecesarias que son todas estas cosas y que trabajo me cuesta empezar a deshacerme de ellas.

      Gracias, Jordi.

      • Porque la ves en cada una de esas figuras y trofeos, las fotos de otras épocas con toda la familia reunida… aunque sean cosas físicas se les coge apego por lo que representan y a quien recuerdan.

        En mi caso, en casa de mi abuela cuelga su sable de oficial de la marina; o en mi propia casa un pequeño póster con «Las Reglas del Jefe» que vi toda mi niñez colgado de una pared…

        Recuerdos y cariño hacia los que se han ido

  2. El recordar no es malo al contrario es la manera que siga viviendo en todos nosotros pero eso si con un poco de tiempo ese recuerdo se convierte cada vez mas bonito y nos acordamos de las cosas bonitas vividas con ellos.Por desgracias ya soy demasiado experto en estos temas.Es un tópico pero disfrutemos mucho mas de lo que están aún aquí y brindemos por los ausente!!! Te recordare toda mi vida QUERIDA SUEGRA!!!

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