Breaking Bad

Texto libre de Spoilers. Se aniquilará sin piedad al que se le ocurra desvelarme el final de la serie en los comentarios o en twitter. Avisados quedáis.

Hace ya más de 3 años escribí este post sobre Breaking Bad. Dos buenos tipos se titulaba. Debió ser al comienzo de la segunda temporada o así. Ahora estoy a dos capítulos del final de la quinta temporada y final de la serie. Si soy así de hereje: veo las series dobladas. La pereza de ponerme a verlas subtituladas. He tardado también en ponerme a verla una vez la he bajado porque sabía lo que ocurriría: me he zampado los 6 capítulos casi del tirón. Porque esa serie atrapa y aquí estoy mordiéndome las uñas esperando que salgan los dos últimos episodios. Y es que Breaking Bad es, en la modesta opinión de este que os escribe, la mejor serie que he visto nunca. Así de claro lo tengo.

Hay series buenas y que empiezan de una forma prometedora, como sucedió con Homeland, por hablar de un ejemplo reciente. Unas buenas interpretaciones, un guión sorprendente y unos personajes llenos de matices. Pero con el tiempo todo eso se ha diluido. En esta tercera temporada, los 6 capítulos que llevo vistos, sólo hemos visto a Brody en un capítulo de regalo, casi obligado para que sepamos de él. Y muchos de los matices de Carrie se han diluido. Esa neurosis, esos puntos de irse por ahí a ligar con alguien, ese estado atormentado. No queda nada de eso.

24. Una serie cuya primera temporada sorprendió por el uso del tiempo real, que los hechos ocurrieran en el tiempo de la serie, el uso de la pantalla partida para hacernos ver los acontecimientos que sucedían de forma simultánea y esos continuos giros en la trama, que sin embargo resultaban hasta creíbles. Todo eso se fue desvaneciendo como el humo en las temporadas sucesivas.

Y hablo de series cuyas temporadas son totalmente independientes, con tramas que terminan, o casi, en cada temporada. Ya es complicado mantener el nivel durante 12/16 episodios como para mantenerlo durante 5 temporadas de 16 capítulos cada una. Pero en Breaking Bad lo han conseguido. No son temporadas tan independientes, es una enorme película. Aquellos dos buenos tipos que comenzaron su andadura hace ya un buen puñado de años poco o nada tienen que ver con los que son ahora. Han evolucionado mucho en un año. Y los hemos visto evolucionar. Hemos visto por qué lo hacían, lo hemos comprendido.

No han cambiado por gusto, las circunstancias obligan a veces a hacer cosas que no queremos pero que debemos hacer. O quizás no, quizás tenemos varias opciones y nos decantamos por la que vemos más apropiada. Muchos dilemas en la serie en los que algunos hubiéramos tomado otros caminos. O quizás el mismo sin pensar todas las consecuencias. En esta serie, como en la vida real, no se puede volver atrás. Bien lo han aprendido todos. Hay que apechugar con las decisiones que se toman.

Yo me estoy planteando seriamente ver de nuevo toda la serie desde el capítulo cero. Un par de capítulos por noche. Si alguno de los lectores de este blog no la ha visto y le apetece ver una serie, que no se deje engañar por cantos de sirena de Juego de Tronos, Dexter’s, incluso Homeland. Enganchaos a Breaking Bad. Yo os envidio a los que no la hayáis visto porque podréis vivir cada sorpresa del mismo modo que yo ya las he vivido y no podré volver a hacerlo igual. A veces no será un viaje agradable, pero es que el viaje de estos dos señores no son unas vacaciones en Disneylandia.