Desubicado

Supongo que si leéis este blog(y si encima me conocéis como es el caso de alguno/a), sabréis que mi trabajo no es precisamente lo mejor de mi vida. No me aporta alegrías y al contrario me da muchos quebraderos de cabeza, enfados y malos ratos. Lo último es la reciente sensación de desubicación, por llamarlo de alguna manera, que me rodea.

A ver, por eso que he dicho al principio que no me siento a gusto en el trabajo, no se hasta que punto sería una liberación que de repente un día me echasen. Así de claro. Por supuesto que no es el momento y se que, a la larga, posiblemente me arrepentiría. No está el horno para andar quedándose uno en el paro, y menos aún con ciertas edades y llevando demasiado tiempo haciendo lo mismo. Lo que quiero decir con esto es que no es algo que me preocupe especialmente. Hace tiempo leí en alguna parte que cuando una puerta se cierra, otra se abre, así que no es algo a lo que le de muchas vueltas.

También hace ya tiempo que descubrí que absolutamente nadie es imprescindible en ningún trabajo. Podemos creernos muy válidos, que hacemos muchas cosas, que si nos fueramos (o si se fuera tal o cual persona) la empresa se hundiría. Nada mas lejos de la realidad. Las empresas están vivas y son como los cuerpos: casi cualquier herida se puede regenerar. Tiene que ser algo muy grave lo que provoque que una empresa caiga. Y desde luego el que echen a una persona no es algo que implique eso.

Toda esta parrafada viene porque no quiero que penséis que tengo miedo a perder mi trabajo, pero es que últimamente me encuentro cada vez mas desubicado en mi empresa. Ya he hablado de cambios que se han producido y cambios que quedan por venir. Me he ido enterando poco a poco de ellos, algunos antes que los demás y otros a la vez que el resto. En estos cambios, varias personas han cambiado de lugar. Creo que mas o menos todos tienen claro cual es su nuevo sitio. Algunos lo van asumiendo con rapidez, otros están tardando mas, para otros no ha supuesto mucho cambio, otros ven estos cambios y se van adaptando… pero ¿y yo? No lo se. Solo se que las cosas no van a ser como eran, habrá tareas que no tenga que realizar, supongo que tareas nuevas caerán sobre mis espaldas, pero realmente nadie se ha preocupado de dejarmelo claro. Soy mas bien yo el que se va encargando de autoconvencerme de esto.

A otros se les ha explicado, se les ha dicho cuales son los cambios, en que les afectan habiendo sido en su mayoría una especie de «ascenso», por llamarlo de alguna manera. A mi en cambio no paran de lloverme los palos que en mas de una ocasión he comentado, en la medida que he podido, aquí. Mis cambios, por lo menos en lo que estoy viendo hasta la fecha, no están suponiendo ningún ascenso sino todo lo contrario: me quitan tareas, me han quitado el móvil de empresa, ya no tengo llaves y por tanto no soy «responsable» de abrir y cerrar… todos los cambios que, de momento se están produciendo en este sentido no te llevan a pensar mas que cosas negativas: que cada vez pintas menos, que cada día se cuenta menos contigo.

Me convenzo a mi mismo pensando que algo debe haber para mi el día de mañana, que hay planes para mi, pero ahora mismo estoy totalmente desubicado y nadie se dirige claramente a mi a contarme que planes de futuro hay conmigo. Estoy un poco de chico para todo. No soy experto en nada, pero sirvo igual para un roto que para un descosido, puedo echar una mano a cualquiera, pero no acabo de tener tareas propias. Aún mantengo algunas, pero las tengo que ir soltando y llegará un día en que me quede sin trabajo propio, sin ese saber cual es mi trabajo. Llegará un día, no se cuando pero creo que no demasiado tarde, en que llegue a preguntar «¿Que hago hoy?».

Esta claro que tener la mochila demasiado cargada no es bueno, pero no tener mochila tampoco creo que lo sea. Supongo que algún día llegará alguien y me dirá cual es mi nueva función, que tengo que hacer, pero hasta que llegue ese día, cada vez me siento mas desmotivado, y mira que me parecía difícil, pero los mismos malos rollos continúan, las mismas historias, pero cada vez me siento mas lejos de todo, cada vez me siento mas un cuadro apartado de todo.

4 comentarios en «Desubicado»

  1. Esto Dani me recuerda que uno nunca es como quiere ser sino como es, te lo comento porque aunque trates de evitar preocuparte por el trabajo si ese es tu caracter te preocuparas por el. Por desgracia uno en el trabajo es como es más o menos en la vida real; soy de los que piensa que no se puede estar actuando las 8, 9, o las horas que sean. Por ejemplo como sabes he estado bastante tiempo parado y ahora que empece a trabajar de nuevo dije no me voy a atorrullar con los tipicos problemas que surgen en todos los trabajos de los cuales muchas veces uno no es responsable pero le quieren hacer serlo. Y que va, igual que por ejemplo, se que mas o menos me conoces en ese aspecto, dije no voy a ser tan apretado con lo de llegar media hora antes y no tomarmelo tan a pecho el trabajo. Pero eso son los primeros días, ya te digo, luego uno vuelve a sus fueros. Igual que eso desde algún punto de vista puede verse como positivo habra cosas negativas que aunque trate de cambiarlas por el caracter no pueda pero uno tiene que tratar de encajar donde este más a gusto y como has dicho no esta la cosa para muchos bailes. Saludos.

  2. Me ha gustado mucho eso de que uno no es como quiere ser sino como es. Que razón tienes. Lo cierto es que cambiar es muy dificil, al final las cabras siempre tiramos al monte, pero hay ciertas cosas que si se tienen que poder cambiar, aunque cueste. El trabajo no puede ser nuestra vida, solo una forma de conseguir dinero para vivir lo mejor que podamos.

    Me alegro que estés trabajando de nuevo, es una suerte en los tiempos que corren tener trabajo. Por eso tenemos que aguantar lo que tengamos que aguantar: no nos queda otra. Pero en mi propósito esta cambiar la forma de tomar las cosas. Espero que algún día lo consigamos, porque ese sobreesfuerzo que realizas y que muchos realizamos al final no sirve para nada. Nadie lo agradecerá nunca, excepto nosotros mismos.

    Un saludo.

  3. Creo que puedes hacer dos cosas para intentar quedarte más tranquilo o, al menos, cubrirte un poco las espaldas ante esta situación.

    La primera sería ir a alguien con autoridad en la empresa y comentarle tus inquietudes. Incluso si tenéis algún enlace, un psicólogo o algo así en la compañía, para algo están. Sería comentar tus temores a alguien que pueda darte respuesta y que te digan si te tienen en sus planes o no. Por supuesto, te pueden engañar, pero es una manera de salir de dudas. La comento porque a mí me ayudó a estar más tranquilo en una situación laboral un poco negativa.

    La segunda posibilidad es ir mirando ofertas de trabajo que se adapten a tu perfil. Ver cómo está la cosa en tu localidad, incluso quizá tener alguna entrevista si te surge la posibilidad. Tantear un poco el terreno, vamos. No sé cómo será allí, pero donde yo vivo puedes acudir a algunas «agencias» laborales buscando mejorar tu puesto actual o cambiar de aires. No se comunican con tu empresa actual y te comentan si encuentran algo para tu perfil que te pueda resultar de interés. Yo no he probado, pero conozco un par de casos a los que les ha ido bien.

    En fin, son dos posibilidades que no te comprometen a nada (bueno, la segunda no te compromete realmente a nada) y te pueden ayudar un poco.

    Un saludo.

  4. Bueno, lo de hablar con alguien allí se me antoja imposible. Por supuesto, no tenemos psicologo (es una empresa pequeña y no da para tanto, ni creo que le importara a nadie aunque lo hubiera). La otra opción es la que tengo en mente, porque no se por donde saldrán los tiros, pero todos sabemos como anda la cosa así que toca aguantar y esperar a ver que pasa con el tiempo.

    Un saludo.

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.